- "Puede que sí o todo lo contrario...
...aunque con toda seguridad sí, pero puede que poco probable". Fueron las primeras palabras pronunciadas por Germán Vellatusta nada más sufrir en propias carnes el alumbramiento de la que abierta de piernas estaba y manifestante en grito ensordecedor se encontraba, su parturienta y doliente madre. Los allí presentes no daban crédito a lo oido, ni a los amigos faltos de dinero, así que, aunque certeros en lo escuchado, nadie ni ser ni animal ni vegetal ni mineral comentó lo allí ocurrido.
No volvió a hablar el nenonato, por más que la madre amamantísima le pidiera entre risitas histéricas "di tú, sí di tú lo que dijiste mientras te estaba pariendo, di que no fue ensoñación mía, repite o no comes hoy", hasta que fue cumplidor de los tres meses de tierna edad en que volvió a repetir - "Puede que sí o todo lo contrario aunque con toda seguridad sí, pero puede que poco probable, ¿comeré hoy?". Ya la paridora sospechó que la indecisión sería la fiel compañera del mamón que ansioso buscaba la leche hambriento de tres meses repitiendo el puede que sí o todo lo contrario aunque con toda seguridad sí, pero puede que poco probable.
Y así fue sucediendo su vida, instalado en la indecisión más absoluta, tanto que no le hacía falta ni hablar pues sólo con la mirada y el mover tintineante de su cabeza daba respuesta a cualquier interrogante aunque fuese un "¿qué tal estás?" educado y sin intención de escuchar respuesta, él se debatía entre un "puede que esté bien o todo lo contrario aunque con toda seguridad esté bien, pero puede que poco probable" que hacían que cualquier ser humano o animal o vegetal o mineral huyera en acertada escapada hacia el silencio.
Murió Germán ya octogenario, próximo al nueve más el genario, ante un dolor agudo fuerte de morir llorando y con un "puede que sea ahí el dolor o en el lugar contrario, aunque con toda seguridad sea ahí, pero puede que poco probable".
Descanse en paz, o puede que no, aunque con toda seguridad puede que no existiese, pero puede que todo lo contrario. Pues eso.
11 enero, 2007 14:21
Este Germán debía ser gallego XDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
Jop, no he podido evitarlo :P
Mis disculpas a los gallegos ;) top
16 enero, 2007 03:56
Santo!
sinmás ! con el respeto que Don Germán hoy finado me merece, no he podido evitar reirme con su profunda elocuencia:)
Besos para ti... top
18 enero, 2007 01:10
Isthar al menos ascendencia seguro que tenía XD ningún gallego lo ha leido pues, seguro que lo era.
Un beso.
Cieloazzul pobre él, que su elocuencia sirve para tu mofa Xd
También para ti esos besos. top
18 enero, 2007 11:23
A este Germán lo que le hacía falta era un "meneito" para despabilarle. De todas formas que cosas mas raras dicen los bebes en su tierra. Por aquí lo normal es: "Tres pecas esquizofrénicas patinan raudas el carrefour, Mamá." Y Santaspascuas.
Reciba usted otra regadera aún más florida. top
18 enero, 2007 20:17
Querido Gavanido,
fue éste un tipo esbelto, fornido y de agraciada planta por lo que se le ofrecieron muchos meneitos, a los que él contestaba "puede que sí......" ya sabes.
Y usted que me enseñe sus macetas para darle función a la regadera. Gracias tenga usted. top